Malargüe, a 325 kilómetros al sur de Mendoza, tiene un paisaje y una historia milenaria atrapante. Sus montañas y sus valles, guardan historias como de la Sociedad de la Nieve, cavernas secretas, y el descubrimiento de fósiles de una nueva familia de dinosaurios gigantes que habitaron América del Sur.
Desde el 18 de mayo de 2024, después de décadas de investigación y un trabajo coordinado con organismos científicos e instituciones provinciales y municipales, parte de la riqueza palentológica puede visitarte en el Parque Municipal Huellas de Dinosaurios de Malargüe.
Es el primer parque de huellas de Argentina. Es un verdadero museo de dinosaurios a cielo abierto, con potencial científico, educativo y turístico para la región. Es un espacio de divulgación de las especies que habitaron la zona, que se suma a la Ruta de los Dinosaurios de Argentina.
El origen del nuevo parque y cómo es
El parque se extiende sobre 700 hectáreas, es reconocido por tener la mayor cantidad de huellas de dinosaurios en Argentina y el único sitio de este tipo en Sudamérica.
Entre las huellas destacadas se encuentran las del Titanopodus Mendozensis y el Teratopudus Malargüensis, que datan de hace 72 y 80 millones de años respectivamente.
Surgió a partir de un descubrimiento realizado por investigadores del CONICET. Y cuenta con el respaldo por un equipo científico que, desde el descubrimiento de las huellas, ha realizado investigaciones en el sitio, ha participado en el plan de manejo y se ha encargado de preservar cada una de las huellas, bajo condiciones climáticas extremas propias de la cordillera.
Las huellas fósiles del parque fueron descubiertas en 2006 por Bernardo González Riga, investigador del CONICET, especialista en dinosaurios saurópodos.
González Riga había realizado exploraciones en la Formación Loncoche a lo largo de más de diez años, y en otras unidades cretácicas. Descubrió diversos vertebrados fósiles, entre ellos el Mendozasaurus, el primer dinosaurio descripto en la provincia cuyana.
En 2008, junto a investigadora del Conicet Mercedes Prámparo, especialista en paleopalinología y paleobotánica, propusieron la creación del Parque Huellas de Dinosaurios a la Legislatura de Mendoza y a la Municipalidad de Malargüe. Y promovieron un convenio de cooperación del Conicet para avanzar en el proyecto del plan de manejo del parque.
El Parque Cretácico no solo presenta estos fósiles, sino que también cuenta con un centro de interpretación equipado con un laboratorio paleontológico, donde los visitantes pueden jugar a ser paleontólogos por un día.
Además tiene un mini museo con réplicas de dinosaurios del Cretácico, tecnología 3D para visualizar las huellas y diversos servicios como boletería, merchandising, buffet y guías tanto públicos como privados, complementan la experiencia.
Para un enfoque más global, el parque destaca la biodiversidad autóctona y ofrece una visión completa del ecosistema que coexistió con estos gigantes prehistóricos.
Qué huellas pueden verse
«En el parque se han identificado más de 400 huellas, la mayoría producidas por dinosaurios titanosaurios, que son grandes herbívoros de cuello largo que dominaron los ecosistemas del Cretácico Superior en América del Sur», explica González Riga.
En los primeros estudios, este paleontólogo mendocino junto al doctor Jorge Calvo, descubrieron que las huellas preservadas en la Formación Loncoche presentaban características únicas al compararlas con el registro de huellas del mundo.
El hallazgo permitió asignarle un nombre específico a esta nueva familia de dinosaurios, los llamaron Titanopodus mendozensis (“pies del titán de Mendoza”), que quedó registrado en una publicación de 2009.
Investigaciones posteriores permitieron estimar la velocidad de paso de varios ejemplares de Titanopodus: «Caminaban a 4,7 o 4,8 km/h sobre ambientes deltaicos cercanos a un litoral marino». En ese entonces, hace 72 millones de años, el mar ingresaba desde el océano Atlántico e inundaba gran parte de América del Sur», describen los científicos.
Las huellas Titanopodus se hallan junto a esculturas realizadas a escala de los dinosaurios.
También se pueden ver huellas de terópodos (dinosaurios carnívoros). Aunque en menos cantidad, permiten identificar la presencia de estos ejemplares en este ecosistema del Cretácico Tardío, previo a la extinción de los dinosaurios.
Horarios y cuánto cuesta la entrada
- El parque puede visitarse todos los días.
- Las entradas cuestan $ 2.000 para turistas mayores y $ 1.000 para menores. Jubilados, gratis. También hay precios diferenciados para residentes, grupos, estudiantes, etc.
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